Dani Benítez ya tiene castigo por su botellazo al colegiado Clos Gómez después del pasado Granada-Real Madrid. El Comité de Competición le ha impuesto tres meses de sanción al balear, castigo que deberá cumplir en periodo de competición. El organismo ha aplicado el artículo 99 del código disciplinario de la Federación, referido a agresiones contra árbitros, directivos o autoridades deportivas. En su apartado 1 se especifica lo siguiente: “Incurrirá en suspensión de tres a seis meses el que agrediese al árbitro principal, a los asistentes, cuarto árbitro, directivos o autoridades deportivas, siempre que la acción fuere única y no originase ninguna consecuencia dañosa”.
El hecho de que Clos Gómez precisara en el acta arbitral del encuentro que no necesitó asistencia médica ha librado a Dani Benítez de un castigo que podría haber llegado a los seis meses, lo que hubiera supuesto una de las mayores sanciones en la historia del fútbol español, solo equiparable a la del barcelonista Stoichkov, sancionado en 1990 con esos seis meses después del pisotón que le propinó al colegiado Urizar Azpitarte en un Barcelona-Madrid de la Supercopa. Esa sanción se le rebajó posteriormente a dos meses y medio.
Dani Benítez empezará a cumplir la sanción a partir de hoy y esta abarcará periodo de competición, por lo que quedará suspendida a la finalización de la Liga y se reanudará al inicio de la siguiente temporada. Así, si hay dos jornadas de Liga en agosto, como está diseñado, la sanción llegaría hasta principios de noviembre.
Además de Benítez, Competición ha sancionado con cuatro partidos a Moisés Hurtado y Siqueira, y uno a Alex Geijo, por los insultos y protestas a los colegiados. En cuanto al número de partidos, la mayor sanción del fútbol español fue de 24 partidos. El sancionado fue Cortizo, del Zaragoza, por romperle la tibia y el peroné a Collar, del Atlético, el 27 de diciembre de 1964. Andoni Goikoetxea, central del Athletic y de la selección española, fue sancionado con 18 partidos después de fracturarle el tobillo a Maradona el 24 de septiembre de 1983. Los diversos organismos le redujeron al final la sanción a siete partidos. Fernández, central del Granada, fue sancionado con 15 partidos por lesionar de gravedad a Amancio el el 8 de junio de 1974, en partido de Copa.
En los últimos años, la sanción más grave impuesta por Competición fueron los 10 encuentros que recibió el madridista Pepe en 2009 después de agredir a Casquero y Albín, además de insultar a los colegiados.
Se le fue de las manos. Fue un acto reflejo, él no quería agredir a nadie, pero la disciplina deportiva es así.
ResponderEliminarEstoy totalmente en desacuerdo contigo.
EliminarLo siento, compañera, pero con la Iglesia hemos topado... Soy árbitro de fútbol de Tercera División y he sufrido situaciones como ésta. Un jugador que lanza una botella contra otra persona sí quiere agredir a alguien. Hay que erradicar la violencia totalmente del deporte. Me parece incluso corta la sanción: el ejemplo que ese futbolista da a la sociedad es peligrosísimo.
Quizá el desconocimiento te haga opinar así. De todas formas, gracias por tu opinión.
Un saludo